CORDOBA-Lo que iba a ser un día en la playa, se convierte en una pesadilla. Así de real la historia. Una colaboradora se va de viaje y como no, por el camino tantos y tantos perros abandonados en carreteras, uno se amarga el trayecto con estas estampas y no poder hacer nada, porque se podría llenar una furgoneta de perros abandonados cada 100 kilómetros...
Pero de repente una imagen desoladora: Un cachorro de Pointer es casi atropellado delante suya, el animal cruza la carretera jugándose la vida para mendigar un mísero paquete de patatas casi vacío. Esta vez no pudo echar la mirada para otro lado.
INDALO tiene solo 6 meses, es un Pointer puro, macho, en los huesos, solo pesa 11 kilos, se le ha tenido que llevar de urgencias al veterinario, el estado era lamentable y sus ojos color chocolate dicen mucho de lo que le ha tocado vivir.
Así queda truncado un día para desconectar en la playa, salvándo a un perro de una muerte segura (lenta o rápida, quien sabe). Se acaba recurriendo a veterinarios de guardia, metiendo al animal en el apartamento y sacando dinero para gastos veterinarios de donde no hay. Esta historia es tan cotidiana como triste.
Ahora INDALO está a salvo, claro está, pero no por eso deja de necesitar ayuda, necesita un hogar, recuperarse de su extrema delgadez, necesita el cariño que no le han dado en su corta vida, por eso pedimos para él una adopción.
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