SIEMPRE EN NUESTROS CORAZONES
¡AVISO! ALGUNAS IMAGENES SON DESAGRADABLES Y DURAS, PUEDEN HERIR LA SENSIBILIDAD DE ALGUNAS PERSONAS PERO QUIERO MOSTRARLAS PORQUE ES LA TRISTE REALIDAD QUE VIVIMOS EN ESTE PAIS. LAS ENTRADAS LAS VOY ACTUALIZANDO SEGUN ME LLEGA LA INFORMACION SOBRE LOS DIFERENTES CASOS.



jueves, 27 de enero de 2011

NALA Y ULISES EN ADOPCION EN SEVILLA


Fecha de nacimiento: Diciembre 2008

Raza: Mestizo
Sexo: Hembra
Tamaño: Pequeño
Esterilizado: Sí
Carácter: NALA es una cosita ¡pequeeeeeeeeeeeeeeeeeña! ¡5 kilos de besitos! Nala se pone siempre tan contenta cuando sus papás de acogida llegan a casa que se pasaría horas dándoles besitos. Y besitos para despedirse también, claro. Y besitos para irse a la cama, cómo no. Y besitos para… ¡besitos siempre! A ver si así consigue convencernos a todos de que su sitio está en un hogar de esos tan guays en los que siempre hay de comer, en los que hay sofás y camitas mullidas y en los que vive gente que, ostras, ¡también da besitos! Nala no quiere volver al encierro en una caja de frutas, ni quiere recordar jamás que un día la maltrataron; como sus compañeros Drago y Hannah, solamente busca gente tan especial y dulce como sus papás de acogida para que sean su familia por siempre jamás.


Hace ya muchos siglos que Homero nos contó cómo Ulises trataba de regresar a Ítaca, a su casa, tras haber combatido en la guerra de Troya. Cómo luchaba contra todo y contra todos con tal de volver junto a su esposa y su hijo; sus esfuerzos por regresar a un hogar cálido y seguro.
Nuestro ULISES de cuatro patas nunca ha tenido un hogar cálido y seguro. Sus pocos años de vida los ha pasado encadenado de día y encerrado en una caja de noche.
Su viaje hasta llegar a nosotros ha sido largo y duro como lo fue el del Ulises de Homero. Y por eso se merece su particular Ítaca.
Ulises se merece un hogar en el que abrir sus preciosos ojos a un mundo de ternura y seguridad. Esos ojos que en las fotos reflejan miedo, soledad e inocencia, tienen que convertirse en una mirada llena de vida, alegría y confianza.
Ulises tiene mucho miedo, muchísimo miedo a la gente, de la que hasta ahora solamente ha recibido golpes, insultos y desprecios. Hay que acercarse a él despacito, susurrándole bajito su nombre y esperar… esperar a que él sepa que estamos aquí para quererle, para quererle con el alma; y para cuidar de él. Para enseñarle que el mundo no es un lugar tan horrible, que los monstruos, los gigantes y los ogros ya sólo habitan en sus pesadillas; que a partir de ahora hay que aprender a jugar, a confiar y a amar.
Si por ahí hay alguien con un corazón inmenso y con las armas necesarias para acabar con los monstruos de las pesadillas; si por ahí hay alguien que quiera querer, que quiera cuidar de nuestro pequeño, dulce y amoroso Ulises, por favor, que no se lo piense y que nos escriba. Ulises tiene que irse a Ítaca, tiene que irse a casa.
Ulises no es un perro de raza, o al menos que nosotros sepamos (aunque confesamos que lo de las razas y “pedigrines” varios, no es lo nuestro) Es de tamaño pequeño/mediano y habrá nacido hacia el mes de enero del 2010.
Para más información o para adoptar a cualquiera de ellos escribe a adopciones@elrefugioescuela.com  

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