Hoy Charlie acabó en la perrera. Ya tiene un número identificativo y una fecha: fecha de su fin…
Lleva un mes vagando por el centro de la ciudad, un mes sin que nadie haga un solo buen gesto hacia él, un mes de recibir patadas. Tiene el rostro cubierto de cicatrices que no se curan causa de posible leishmania, un ojo inflamado que hay que operar y una tristeza con la que no puede convivir: ya no es libre, le han quitado su libertad y su dignidad, dejándolo entre las rejas de la perrera municipal.
No hay más que contar de él. Estaba lleno de vitalidad, estaba feliz y se alegraba a cualquier trozo de salchicha y una pequeña parcelita con el sol pegándole en la cara. Se conformaba con tan poco…
Charlie es un caso urgente, un caso “no-adoptable”, pues es algo grande y no tiene raza, cosas por las que más de uno lo rechaza sin pensarlo dos veces. Aun así, pide a gritos un hogar, alguien que lo
salve de esta miseria y le deje vivir en paz.
Tiene 2 años, tamaño mediano-grande, es simpático, bueno (no hace un solo mal gesto) y muy agradecido.
Nos gustaría poder hacer por él algo más que difusión pero en estos momentos el refugio está muy saturado y cada vez hay más abandonos, más perritos tirados por encima de la valla... No podemos más...
Lugar: Granada
Contacto: informacion@chuchos-gr.org
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