Este pequeño lo llevaban a la perrera de Mairena de Sevilla el jueves, lo vimos cuando llegaban para dejarlo cuando llegaba una compañera para recoger a Bobi, el perro de la puerta de lata que se lo llevó la perrera esa mañana.
El muy cabrón del dueño del yorki ya no lo quería, le dijimos que se lo volviera llevar a su casa que se lo recogiamos en unos 2 ó 3 días hasta encontarle un hogar y dijo que no se lo llevaba, que nos lo daba o lo dejaba allí. Nos vimos obligados a recogerlo, le pedimos que en vez de dejar los 35 euros que le pedian en la perrera que nos lo diera a nosotros para poder pagar la residencia y nos dió 20 euros solo y si no lo dejaba en la perrera, ¡hay que ser cruel y malo! Siempre pasa igual, llegas allí y te los traerias a todos, ¡pobrecitos! Este yorki por lo menos no ha llegado ni a entrar, ahora está en la residencia esperando adopción. Tiene 5 años y es super cariñoso, se ve que está falto de cariño, solo quiere estar en brazos y que lo acaricien. Tiene chip y se llama Bobi, el mismo nombre qu el perrito que ibamos a recoger que se llevó la perrera, estaba predestinado que fuesemos a la perrera a por los 2 Bobi. Leed abajo lo que me cuenta mi compañera sobre la recogida del yorki
"Ya viste que hago lo posible y lo imposible por ayudarte a ti y a los perritos. Fui a recoger a Bobi a la perrera, y que vaya tela lo mal que lo pasé alli porque queria traermelos a todos, pero tuve que hacer de tripas corazón y aguantar aun con lágrimas en los ojos sin poderlo soportar, pero bueno, el caso es que rescatamos a Bobi, y cual fué la casualidad, mientras esperabamos a que nos sacaran al perro, entró un matrimonio para dejar a un perrito en la perrera porque decian que no lo podian tener ya en casa. Te mando las fotos, si lo hubieras visto cuando vió alejarse el coche de sus dueños que lo dejaban abandonado alli, ni te cuento, empezó a lamentarse mirando para el coche que se alejaba, lo cogí en brazos y lo consolaba haciendole caricias y hablandole y ¿sabes?, no le costó mucho sentirse agusto, pues creo que andaba falto de mimitos, muy falto.
El caso es que cuando le pregunté el nombre del perro, también se llamaba Bobi, como el que íbamos a recoger, ¡vaya casualidad!
Es muy cariñoso y solo quiere que lo tengas en brazos. En fin, los dos Bobis están a salvo de personas que comparan a animales con muebles, olvidándose de que también tienen corazón."
Contacto tf:639 246 949 / natisabe@hotmail.com 
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